Queriendo voltearla la invertí y entonces me entraron las ganas de traerla aquí.
He hecho un blog donde guardar las fotos que hago ultimamente.
Esta temporada secuestro mi tiempo en tareas muy hermosas e ilusionantes. Trabajo sacando hacia fuera algunas de las cosas que viven dentro de mi y mis cuentos miroscópicos. Esto me hace sentir poseída por esa efervescencia que me lleva a querer mostrarlo todo y fabricarlo todo. Invadí nuestra casa y nuestras vidas de objetos que viven en mi cuentos, pero que ahora ocupan tres metros de alto y gran parte de la casa, para poder "ilustrar" la paredes de lugares donde organizan campañas de animación a la lectura. Aún en medio del placer de dar rienda suelta a mi creatividad necesito descansar, pero, sobre todo, desconectar y haciendo fotos a las plantas lo consigo.
Desconecto la cabeza mientras el ojo comienza a posarse en el mundo que me rodea y mi corazón y cerebro se hidratan con aguas y luces de primavera.
Me doy cuenta que, haga lo que haga, todo mi mundo, de dentro y fuera acaba filtrado por mi universo miroscópico.
Me doy cuenta que, haga lo que haga, todo mi mundo, de dentro y fuera acaba filtrado por mi universo miroscópico.
Me voy a la bañera, que es festivo, llueve y hace frio
