jueves, 21 de enero de 2010

Patti Scialfa , la chica del Boss







LLevo enamorada de la voz de su marido, y quizás de su marido , desde los diecisiete, pero 
eso nunca me ha 
impedido que me guste Patti Scialfa y su extraña voz.


Ahora que corto hilvanes y remato los hilos colgantes de mis 
cuentos es ella la que me está acompañando más.
 
Es la mujer de Bruce y, para algunos "entendidos" su debilidad artística. Hay que joderse...  


Yo no puedo imaginar otra voz acompañando al boss, no la hay, la de ella es muy peculiar.
Pero además ella sola me gusta aún más.


Dejo aquí estas dos joyas, mientras se quedan conmigo y mis horas sumergida en el universo Faxildiano de cinco niños de cuatro años.


Rumble Doll y Spanish Dancer











martes, 19 de enero de 2010

Recuperando música: Nick Cave






De vez en cuando saco la cabeza de entre mis láminas y cojo una
foto y me relajo dándole color.
La música sigue sonando y con ella mi corazón.
Nick Cave:


INTO MY ARMS






 don't believe in an interventionist God
But I know, darling, that you do
But if I did I would kneel down and ask Him
Not to intervene when it came to you
Not to touch a hair on your head
To leave you as you are
And if He felt He had to direct you
Then direct you into my arms

Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms

And I don't believe in the existence of angels
But looking at you I wonder if that's true
But if I did I would summon them together
And ask them to watch over you
To each burn a candle for you
To make bright and clear your path
And to walk, like Christ, in grace and love
And guide you into my arms

Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms

And I believe in Love
And I know that you do too
And I believe in some kind of path
That we can walk down, me and you
So keep your candlew burning
And make her journey bright and pure
That she will keep returning
Always and evermore

Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms, O Lord
Into my arms



Y en castellano... (aunque no sé cómo  estará traducido...)


A MIS BRAZOS

Yo no creo en un Dios intervencionista
aunque sé, cariño, que tu lo haces
Pero si lo hiciera, me arrodillaría y Le pediría
Que no interviniera en lo concerniente a ti,
Que no tocara un pelo de la cabeza,
Que te dejara tal como eres
Y si sintiera que tiene que dirigirte,
entonces que te dirigiera a mis brazos

A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos

Y yo no creo en la existencia de los ángeles
Aunque mirándote me pregunto si eso es verdad
Pero si lo hiciera los convocaría a todos
Y les pediría que velaran por ti,
Que cada uno encendiera una vela para ti
Para hacer brillante y claro tu camino
Y para caminar, como Cristo, en gracia y amor
Y te guiaran a mis brazos

A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos

Pero yo creo en el amor
Y sé que tu lo haces también
Y creo en alguna clase de camino
Que podamos recorrer tu y yo
Así que mantened vuestras velas encendidas
Y haced su jornada brillante y pura
Que ella siga volviendo
Siempre y para siempre

A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos, oh Señor
A mis brazos




















domingo, 17 de enero de 2010

Ana





Y ahí está:
 varada,
esperando que suba las marea,
sin escribir ni un verso,
amarrada...

Siempre que pienso  en ti
 sólo me sale decirte que te quiero.


Grelos sobre Londres



Estoy ordenando cosas, y entre otras encuentro esta ilustración para un cuento de Ana "Rasta", una profe, que  además de escribir maravillosamente en Gallego e Inglés,  se ha pegado un curro de la leche confeccionando un libro en el idioma de  los ancestros de Lord Jim (el  comedor de genciana de Don Torrente Ballester)   y su material didáctico.

 Me costó hacerla demasiado tiempo, ya que estaba secuestrada por otro trabajo, pero cuando me puse de verdad disfruté un montón, por lo cual le estoy muy agradecida.

Las fotos, menos las del protagonista, son de Vitor Mejuto,  el cual me las cedió con su habitual generosidad, aún sabiendo que iba a proferirles este destrozo.

La lámina original ( sin grelos voladores,  ni créditos de Novedades  Prieto)   en este momento es propiedad del Excelentísimo Ayuntamiento de Zarravea, cuyo alcalde viajará a Londres el próximo  2 de Febrero, junto con su secretaria, para comprobar que los grelos han sido recogidos y entregados en su destino...


sábado, 16 de enero de 2010

Poesía húmeda




Tendida,
con los muslos como alas abiertas,
dispuestas al vuelo.. me incitas,
me invitas a viajar por lácteas vías
y negros agujeros levemente desvelados
por tú mano que juega
por pudores y sudores enjugando
entre pétalos de carne, el estigma
de tu flor más desnuda,
Mojándolo todo...
Volando por universos de licor.

Húmedas llamas
los labios que con tus dedos
delicadamente delatas, dilatas para mí,
mostrándome, obscena la cueva del milagro
por donde mana el líquido rayo de la vida,
incandescente fuente, lechosa lava,
salpicaduras de agua profunda que inunda
Mojándolo todo...
volando por universos de licor.

Mi boca
besando tus labios incendiados
se dispone a beber en tu cáliz de polen y licor
y, entre zumos y zumbidos de olas y alas,
libidinosamente libar el néctar
de la flor de tus mareas...
lamiendo la miel salada que te fluye
y quema mi lengua que vibra,
lasciva, entre savia y saliva
mojándolo todo...
volando por universos de licor

Mis alas
de cera batiendo combatiendo tu fuego
en oleadas de ardientes espumas y plumas
e Ícaro volando tan alto, tan alto...
que a punto de entrar en el jardín del Edén,
fundido su vuelo por tu derramado sol,
cae, como el ángel exterminado,
al mar de los naufragios,
mojándolo todo...
volando por universos de licor.






Tu cumple


Me hubiera encantado ponerme mis mejores galas para ir a celebrar tu cumple...

Tenía escrita una carta de amor para ti pero no sé donde la metí .  De cualquier modo, que sepas, que  en cuanto pueda mirarte a los ojos te lo diré todo.

Te quiero, mi niña, mi hermana glamourosa y amorosa.


domingo, 3 de enero de 2010

Parte metereológico



Hablar de mi salud me resulta difícil, más que nada porque contando como he estado, o estoy,  me  siento dando paso,  o mejor dicho, cediendo más espacio  a la  enfermedad. Me siento abriéndole las  puertas, tirando muros y dejándola pasar  de mi cuerpo a ese lugar de mi alma de atea donde se encienden mis ánimos,  y dándole más importancia de la que quiero concederle. En definitiva,  me siento nombrando y renombrando un mal estar que cada vez que cede yo  ya no  quiero mirar, no vaya a ser que se me instale  como si toda yo fuese su casa y ocupe todo mi universo.  Ya sé que tengo que prever ciertas cosas, y lo hago y lo haré , pero tengo una necesidad tremenda de una tregua como la que tuve hasta ahora después de descubrir la SQM esta de las pelotas.   Ya me llega cuando todas mis fuerzas y todos mis planes consisten en no ahogarme, o no irme por la pata abajo  y mi universo contrae el zoom  a cuatro prioridades:  conseguir que el aire encuentre el camino hacia mis pulmones , que  la comida tarde en encontrar la salida y no monte un cristo,  que no me vuelva asesina de ningún médico  y que no puedan conmigo la desesperación ni el miedo.
Ya me llega, por eso cuando los síntomas no están, o no son tan cabrones,  dejo de mirarla, por más que tenga que tomar medidas, ya que ella solita se encarga de volver mi cara hacia la suya.

Pues por eso no quiero contaros como han sido los días, porque hablo primero contigo, y luego contigo, y al final del día contigo, y, lógicamente, además de sentir que me quereis tanto como yo a vosotros, siento   todo lo anterior y me da mucha pereza,  porque quiero  mirar hacia  el paseo con setas o con mar, hacia  el  sofá con caricias,  dejar mi mirada posada en  las vacaciones con todos mis  hijos, en los ratos con amor de  amigos, en las confidencias de hermanas, en mis cuentos, en los  cuentos de otros, en las palabras vía telecom,  en los blogs amigos,  y  en un  avión amarillo que hoy  eschotamos varias veces...

La noche del viernes hubo marejada alta sobre mi noreste, apenas dormí, sentada, carraspeando y temblando de frío.  Ayer estuve todo el día sentada en el sofá, con cagarrina, pero hoy ya salí de nuevo a pasear ( a seguir rastreando cantareliñas)  y después de comer estuve grabando hijos intentando hacer volar  un avión amarillo. Lo conseguimos, incluso después de eschotarlo al primer aterrizaje, destrozarle las alas contra el suelo y el timón contra un árbol, y salvarlo de la boca de un perro. Alfonso fillo es todo un manitas, (montó los boxes en pleno monte)  y aunque Antón sufrió y se resistiera a  volver a pilotarlo y yo sea una pésima grabadora de vídeos, la risa, una pequeña muestra de toda la que hubo,  quedó grabada en varios vídeos. Intentaré subir alguno , mientras mando a la mierda, en este momento de calma,  a la SQM de los cojones.

sábado, 2 de enero de 2010

Año nuevo




 Siempre me han dado igual los calendarios y los propósitos de enmienda tan típicos de estas fechas, pero  a  mi alma de gallega ateosupersticiosa parece traérsela al pairo,  ya que, a poco que me despiste,   me la encuentro cometiendo la traición  de hacer  lecturas de presagios tan inverosímiles como  irracionales.

Esta primera mañana del año  quise ir al monte  sabiendo que iba a ser el primer paseo del año, y que mi subconsciente húmedocelta se pondría a hacer cálculos de cómo sería el resto del año.  Elegí el olor marrón de los helechos húmedos que cubren las faldas de Lobeira, el verde aroma del  musgo agazapado bajo las agujas  desprendidas por  los pinos, y el perfume amarillo, casi anaranjado, de los cantarelus que brotan bajo esa mullida  alfombra de delicioso tacto y embriagador sonido.
Chap, chap, chop. chop,
Chap, chap, chop. chop - chapoteaban  mis botas  cuando empecé a verlas.

 -¡Ohhhh, mira esto!

Cantarelus del tamaño de un huevo, no de codorniz, si no  de los que ponen nuestras gallinas. Racimos acampanados brotando de la tierra a la sartén,  pasando por ese entusiasta  momento de descubrir el  delicioso oro asomando sobre la tierra.
Ese aroma inconfundible, mezclado con esa alegría indescriptible que da el encontrar alimentos por los bosques me colocó más que cualquier champán de fin de año, si pudiera tomarlo, claro...

Desde luego está claro que los homos llevamos siendo recolectores el 99% de nuestra existencia como especie, sobre todo las homos,  y que nuestro subconsciente recibe los frutos  de la tierra  como el mejor de los regalos que algún día fueron, y a poco que lo dejemos suelto, y le liberemos de lo que le ciñen las cortas  miras de compradores de bandejas en estanterías,  nos encontraremos  saltando ante unas moras, unas fresas silvestres  o unas setas.


A ratos llovía, sin fuerza, con pereza, diría, y ahí estábamos tú  y yo caminando juntos, armados de   botazas, chambergos, gorros, tu romántico paraguas y  la cesta de mimbre  otra nueva  entrada de año.


Empezar el año eligiendo si pasear junto al mar, o  por  medio del bosque  mientras mis hijos duermen, o juegan con la abuela  y tú me acompañas, me parece un lujo, por más cotidiano e insulso que pueda parecerle a alguien  el  salir la primera mañana de enero  a  sólo 1 km de casa en línea recta y cuesta arriba.  Pero sí aún encima me dices que el petirrojo que    nos acompaña todo el rato es el que vive a la puerta de nuestra casa  y barajamos la posibilidad de que se haya apuntado a nuestra salida montuna,  el año no puede empezar mejor, porque no puedo imaginar nada mejor que sentir que tú   crees posible esta amistad pajaril mientras caminamos juntos  otro primero de enero y llenamos la cesta de cantarelas tan deliciosas como la entrada de año montuna  que acabamos de pasar..

Ya tenemos para cinco o seis  revueltos de esos que tanto os gustan y que  adornan maravillosamente  nuestra mesa, así que ¡venir pronto!

¡Feliz año, Felices años!