martes, 17 de junio de 2008

La invasión de los Zarra

Ya estoy paladeando, en plan vicioso total, el sabor de vuestra llegada. Celebrando el encuentro con mi onzita y los reencuentros con ese hijo que tengo en Manchester y con mi amigo de aquella patria que fueron los 13 años. El primer hombre que tembló bailando conmigo.
Es verdad que aquí os desnudo un poco, pero es que esto del tembleque además de ser gracioso y llenarme de ternura, me llena de agradecimiento, puesto que junto a Paco aprendí a estar con hombres que temblaban a mi lado, jajajajajaja ¡ qué chulita! pero es la verdad. Él allanó para mí, del modo más natural del mundo, aquel camino en el que aprendí a ser amiga de los hombres, incluso aunque temblasen cuando estaban muy cerca de mí.
Con Paco todo era fácil, desde ir al cine a ver pelis de las que nos avergonzábamos ante los concienciados del barrio, hasta cazar grillos. Desde que nos decíamos hola hasta que nos decíamos adiós todo era muy sencillo. Además a los 14 ya había dejado de temblar cuando bailábamos, jajajajajajaja.
Paco abría su ventana y tiraba por mí para que yo entrase trepando desde la calle hasta su habitación, ¡Oh qué mal suena eso! y en cambio que bien nos lo pasábamos. Allí descubrí a Julio, que pronto también tiró por mi, tanto que ya no supe vivir sin sus latidos, y juntos descubrimos esa risa loca de complicidad total y bestial que nos hace caminar a un palmo del suelo, y una manera de mirar al mundo, que espero que no se nos borre en la vida.
Si pudiese hacer una peli de aquella época rodaría los ratos juntos siempre con nuestros pies, o nuestros cuerpos , dependiendo de la verticalidad u horizontalidad del día, a un palmo del suelo, pero siempre flotando rozando un poquito la superficie del mundo dependiendo de quien entrase en la escena . El mundo estaba ahí y nosotros, juntos, flotábamos a un palmo de él.
También descubrí a toda familia, padre, madre, hermanas, hermanos, su humor, su ironía y su manera de respetarse unos a otros. Luego llegó el gran regalo, que nació tan precioso, y con una mirada tan suya y que ya sabía decir tanto, que además de enamorarnos a todos, nada más verlo, nos hizo sentir que habíamos crecido lo suficiente como para ser capaces de cuidar a una joya como él.
Julio y Paco, Paco y Julio y ahora David, dios mío qué trío! que lujo, qué vicio, qué poderío...
Sé que el próximo fin de semana me sentiré como una novia que querría casarse con los tres y a la vez, pero puesta a ello, también me sentiré formando parte de mis zarras, haciendo cuartetto del trío, y puesta a ser uno más me pido el del bigote y el puro, qué coño!




Qué viva la invasión de los Zarra.

domingo, 15 de junio de 2008

Comienza la cuenta atrás...


Junio, Julio, Agosto, Septiembre, Octubre, Noviembre, Diciembre... ¡¡¡ENERO!!!
¿Seremos capaces?

Flores precipitandose contra el suelo








Dices que qué me está pasando, que no soy yo, que entras aquí y que no me reconoces...


¿Qué ocurre -te preguntas- qué no dejo salir la humedad que me habita ni siquiera envolviéndola con palabras que escapan por alguna otra boca? ¿Qué me está ocurriendo que hablo sin contarme, que escribo sin dejar salir lo que tú siempre has visto dentro de mis historias, de mis cuentos?



No puedes creerme, lo sé, no puede ser real que tu amiga pase de largo otra vez más frente a sus heridas sin que estás, al menos, doblen sus piernas.


Mira este dibujo, princesa, míralo bien y dime que flores ves más hermosas ¿las que están llenas de color pero estrellándose contra el suelo, o la silueta blanca que queda tras ellas?


Yo no lo sé, pero mis ojos se van hacia la silueta blanca y erguida a la que le están arrancado parte de su vida, sí, parte de su color, sí, parte de su luz, vale, pero mientras el color y el volumen se estrellan contra el suelo, mis ojos se posan en las siluetas blancas que quedan atrás, prendidas en la pared dibujando un presente contínuo, casi inglés, en el que no pasa nada grave si las flores se escapan de ti, porque la belleza es tan misteriosa como la propia vida.


Ni yo misma me reconozco es verdad. Anestesiar los apetitos es lo que tiene, supongo.


Besos de niño, caricias de hombre que te ama hasta la extenuación, palabras encendidas, tardes de domingo mojado mirando la lluvia, correos de amor, promesas de abrazos de los mejores amigos, palabras hermosas, miradas de respeto, días que llueven sobre otros, verano intermitente, hortensias, manzanilla, begonias, claudias, mirabeles, escenografías, torres, árboles, princesas, láminas blancas esperando por mí.







¿Ves este árbol compañera? que yo no pueda comerme ni una claudia no le resta ni un poquito de belleza, nada, y me encanta contemplarlo. Me siento bajo su sombra y veo como los mirlos se comen los frutos que están en el suelo. Otros mirlos y mirlas más humanos se zamparán el resto y yo puede que un día de estos pruebe...ya veré.

Oigo un "sacho" golpeando la tierra bajo la ventana de mi habitación, no lo puedo resistir, el olor de la tierra mojada y pensar en plantar más flores me hace muy feliz, me voy de aquí.


Besos, Te quiero como siempre y ...más.


domingo, 8 de junio de 2008

Paris Texas.






Travis parece que no se inmuta, pero camina hacia donde ella está.
Travis el estoico calla.
Travis ama por encima de su felicidad.
La tiene enfrente, tras un crital de una cabina donde su "ex posa" se gana la vida calentando las pasiones de otros hombres con su dulce voz. Antes no se entendían, y ahora... un sórdido cristal de una sórdida cabina les ayuda a ello.

Travis quiere abrazarla, besarla, estrujarla, salvarla de... ¿ella, quizás?
Travis ama, calla, espera.
Travis ama sin límites.
Travis se siente más grande cuanto menos la tiene, cuanto más la espera,...
¿Travis necesita sentirse generoso hasta la extenuación?


Ya sabes, aveces... veo claves.

Paris Texas.






neuronas de rotulador


"Imágenes neuronales obtenidas mediante una nueva y revolucionaria técnica llamada Brainbow".
Son neuronas de rata.
(aquí pegaba un buen chiste pero en realidad no pega nada)


Neocortex intentando...racionalizar.


Resumen
Precioso todo pero me quedo con estas dos.



Lo revolucionario es que neuronas como estas ya las he visto antes pintadas a golpe de pacientes y amorosos puntitos de rotulador.
Lo que el sistema nervioso pinta, si le dan con qué, él lo había visto antes de que se inventaran estas técnicas de teñido neuronal, aunque aún no lo sepa. La intuición de su pintura es estremecedora.
Fiestas químicas centelleantes que salen de sus dedos a través de los colores de sus rotuladores. Volúmenes fabricados con puntitos de color violando la perspectiva menguante, pero capaces de dar forma a sinuosas curvas que se fugan de verdad. (Aquí también me saldría otro chiste malo)

Puede que esté un poco melancólica y tenga ganas de algún cuadro nuevo, es verdad, pero la verdad de las verdades es que me encontré con estas maravillas buscando telas fluorescentes y nada melancólicas y esta vez ... no me ha dado la gana de guardarme las ganas de hablar de ello.










sábado, 7 de junio de 2008

Ya estás aquí

Sigo en la cama, pero ya cruzaste la orilla y estás aquí conmigo. Ahora montas una tienda apache para Antón e Iván, pero tú y yo ya empezamos el baile.
¿Y estos por qué no bailan? ¿por qué se quedan quietos?
Merda, algo falla. Con lo bien que lo hacen, tanto que parecemos nosotors.
Bueno pues si ellos no bailan es igual porque yo me siento así: bailando contigo sobre una luna encendida.

Soltando lastres





A golpe de sábado de sol y río escarlata, que me tiene prendida sobre el colchón, aprovecho para subir las palabras encerradas en los borradores de este blog.
Momentos de este último mes de mayo que no he sido capaz de poner al clareo de soles y lunas, de lluvias y vientos, secuentrando en mis cajones frases enteras sobre ilusiones y lamentos. Fabricando mis propios lastres.
Allá voy, desandando el camino, despertando las palabras dormidas y reviviendo la intensidad de esos días.

martes, 3 de junio de 2008

Cosas que cuelgan de mis borradoes.




Un breve descanso entre la montaña de tareas que alza sus cotas sin piedad, en ese deslizamiento perpetuo de capas tectónicas que somos el boss y yo.

Las tareas nos crecen como los enanos del circo, y además este año toca ruína, dice. Me parto...la verdad.
Quizás el viernes, para conjurarla, vayamos de excursión a conocer a la famosa mujer que tenía que haber nacido hombre y a la que su padre, se lo hizo pagar tan caro que ya no se sabe que sexo tiene de verdad.

La pobre vieja vampira que precipitó la anterior, y esperemos última, ruína del boss, que ni es vieja ni vampira, aunque en ello lleve todas las de ganar. La vieja que lo ahogó y que ahora sólo se alimenta de huevos de pata suelta por su finca, grelos y berza gallega y que no hace más que llamarle a él, la única buena persona que conoce, soñando con encontrar inversor para abrir una cutre tasca en el pazo de los horrores, mientras el ayuntamiento se está frotando las manos con la realisíma posibilidad de expropiación, ( por cuatro duros y una cómoda habitanción en una residencia de ancianos) de semejante casa y zona verde en medio de la ciudad.

Quiero ver con mis propios ojos las fotos enmarcadas en aluminio, de hombres semidiesnudos de los años 40, entre el humo que exala la piel de la vieja. Quiero ver las alfombras turcas y el skay con tachuelas, que envuelven el frente del mostrador, mientras ella se toma un trago largo de vodka y nos cuenta donde plantar calabazas de tal modo que cubran las antiguas aceras rotas y que sus clientes no reparen en ellas al pasar. Quiero rozar con mi piel la espesa niebla de infinita soledad que convive con Sofía en aquel lugar. Quiero saber a qué sabe la supervivencia eterna en medio de la precipitada e inevitablente decadencia más brutal.
Quiero tocar, oler y saborear las amarguras de la inteperie, del desamparo, para no confundir jamás la tristeza con la soledad.
Será una visita en la que los dos saldremos llorando, para luego buscar la frase con la que pegarnos el ataque de risa más "jevi" de este trimestre contable.
Somos así, la risa nos sujeta en el dolor.




Hace tiempo que no escribo, mejor dicho que no publico una entrada. Escribir escribo mucho, pero lo guardo todo en borradores que no tienen publicación posible, porque una melodía meláncolicamente absurda se ha apoderado de mis palabras.

Un halo de melancolía , que no es mía, se ha empeñado en revolotear sobre mi y mantengo con ella un pulso en el que, además de ganarle, llego a humillarla, sí pero a veces el esfuerzo es agotador y entonces se deslizan, entre cualquier intento de narración, palabras tan cargadas de melancolía que no vale la pena mostrar a no ser que seas poeta y yo no lo soy. Así que empperada estpy en ese pulso en el que de momento gano por goleada. un pulso lleno de láminas que se convertirán en dibujos animados y paredes de habitación, , niñas que se volverán muñecas o cabezas parlantes, colores verdes y lilas que no quieren cambiar de tono cuando pasen de libro a escenario, y maravillosas personas con las que compartir todo ésto y más.

Ratos hermosísimos con algunos seres tan vehementes como yo, y otros que siempre llevan encima gestos y palabras suavizantes, sin perfumes sintéticos. Charlas, paseos, caricias, mimos, comidas, abrazos. ¿Qué mas se pude pedir?


Pues aún así cuelgan de mis borradores algunos dolores:
Cuelgan los abrazos por muerte intempestiva, las palabras que nos contaban pasados entrelazados siendo amigas
Cuelgan como regalos tus lágrimas diciéndome cuánto me quieres y cuanto me echas de menos en tu vida.
Cuelga, sin poder ser vista , la rabia y la tristeza que me dió leer que una mujer enferma por tóxicos no tiene quien se le pueda acercar. Sólo su madre y su padre, los únicos seres que la quieren de verdad.
No importa estar sana, enferma, rota, cosida, sujeta , sólo importa que tu gente no se quede a la puerta de donde tú estás. A la puerta, y fabricando una cárcel a tu medida. Una mierda la verdad.
También me jode saber de tiél y de tiella , de vuestros intentos deseperados de vender el piso para poder escapar de la ciudad, de la baja que no os quieren conceder porque no os someteis a las pruebas de provocación que ellos os proponen. Del recorrido amargo al que yo intento evitar e incluso no mirar.

Cuelgan en la entradas sin publicar los abrazos que casi ya no puedo aguantar sin darte, abrazos a mi princesa de las manos escondidas, y su chico, ese pedazo de hombre dulce y amable que nos acaba de dar un susto peritónitico perdido.
Cuelga su sudor, dolor, delirios, drenaje, más sustos, mientras mi niña, hinchada y dolorida, se entera que está tan de puta madre que es apta para recibir el alta. ¡Hijos de puta!
Cuelgan las ganas de decirte que rompas alguna pared de tu agobiante realidad y te instales con tu chico y su tumor en mi jardín a dejaros cuidar, a sentir la brisa, los pájaros, y que al fin "la mala racha" se ha ido de verdad.
Quiero arrancarte del agobio en el que vives y darte un lugar desde donde empezar de nuevo a mirar, un lugar lleno de abrazos, cuidados, y tranquilidad. Se te ha metido en la cabeza que todo es muy difícil y...eso no es toda la verdad y a veces ser amiga consiste sobre todo, en sacudir hasta hacer reaccionar.

Cuelgan agazapadas un montón de ganas mías, un montón de ganas tuyas, un montón de ganas suyas, un montón de ganas que nunca serán de nadie porque nunca se realizarán.
Y yo lo único que quiero colgar aquí son las ganas que vamos a realizar, las ganas por las que seguir peleando, no las que nos hacen llorar.

Quiero colgar aquí a mis amigos posibles, táctiles, y cerriles. Colgarlos por donde haga falta, para que nunca me dejen las cosas colgadas a la puerta de mi casa y mis deseos, y se queden tan anchos pensando que tiene que ser así...

Pienso en ella, claro, la muchacha encarcelada, pero también pienso en ti, y en ti, y en ti y en mí.